martes, 22 de noviembre de 2011

Nunca.

Ahora que lo pienso, nunca pensé en ti.
Sólo pensaba en nosotros. En mí.

Nunca consideré que también eres humano.
Que tienes tus defectos y complejos, al igual que yo.
Que quizás eso te aterra tanto como a mí.
Que es otra cosa que nos hace iguales.

Me encuentro demasiado egoísta,
enfocándome en mis defectos, en mi miedo,
en no ser lo suficientemente buena como para el perfecto tú que he idealizado.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario